La diabetes es una enfermedad que repercute en todo el organismo y la boca es parte de él. La salud bucodental está relacionada con la diabetes de modo directo e importante. Cuanto peor sea el control de la diabetes más afectación de la boca habrá, es decir, cuando los niveles de azúcar estén elevados y descontrolados, será más susceptible al depósito de placa dental, a las infecciones y a todos los problemas bucodentales. Si importante es para la población la higiene bucodental, en el caso de padecer diabetes es imprescindible un escrupuloso cuidado de su boca.

Acumulación de placa bacteriana

  • La placa bacteriana produce infecciones de encías si no se elimina.
  • Cuando no se controlan los niveles de azúcar, existe mayor riesgo de tener más placa y de sufrir problemas bucodentales.

Gingivitis

  • Es una inflamación de las encías causada por el acúmulo de placa bacteriana sobre dientes y encías.
  • Cuando se padece diabetes, el control de la placa bacteriana se hace más complicado. Por eso, el riesgo de padecer gingivitis en los diabéticos es 3 – 4 veces mayor que en la población general.

Acuda a su dentista ante estos síntomas

  • Encías enrojecidas.
  • Encías inflamadas o sensibles.
  • Encías que sangran.

Periodontitis

Si no se trata la gingivitis y no hay un buen control de la diabetes, puede desembocar en la enfermedad periodontal; ya no está afectado sólo la encía sino el entorno del diente. Es una fase más agresiva, donde con el tiempo se produce pérdida de hueso (dientes más largos), movilidad de los dientes (diastemas y separación de dientes), acabando con infecciones generales de la boca y la pérdida de dientes.

La boca afecta a la diabetes

Cualquier proceso infeccioso afecta a la diabetes. La gingivitis y la periodontitis elevan los niveles de glucosa en sangre. Un correcto cuidado de su boca hará que mejore el control de la diabetes.

Consejos para los diabéticos

No son diferentes a los de cualquier otra persona, solo que hay que ser mucho más exquisitos en el control de la diabetes y de su propia boca.

  • Cepíllese después de cada comida con pasta dentrífica que contenga flúor.
  • Aprenda el correcto uso de la seda dental y úsela una vez al día.
  • Use enjuagues bucales antibacterianos (sin alcohol). Le ayudará a eliminar bacterias y controlar mejor la placa bacteriana.
  • Informe siempre a su odontólogo de su enfermedad.
  • Acuda al dentista para limpieza dental cada 6 meses.
  • En cuanto note cualquier síntoma de problemas con las encías, acuda
    a su dentista.
  • Ante cualquier intervención quirúrgica, su dentista y su médico han de estar en contacto para ajustar o modificar su medicación, evitando la aparición de complicaciones y prevenir las infecciones.

Recuerde que el control de su diabetes mantendrá sana su boca. Y el control de su boca mejorará el control de su diabetes.

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